DÍA DE LA MADRE

Hoy al despertar y caer en la cuenta de que es día de las madres, porque asi lo determinan las leyes modernas del consumismo más salvaje, pensé no obstante que es bueno hacer las reflexiones oportunas y dar gracias a Dios por la presencia de nuestra Madre en nuestra vida.
La mía, a pesar de sus achaques,todas las mañanas me contesta todavía al teléfono. Ya no me llama ella, porque no recuerda el número o no me recuerda a mi (No he querido averiguarlo) Y cada mañana le digo lo mismo:

_Buenos días mamá ¿has desayunado ya?
_ Sí, hija, creo que sí, supongo que tu hermana me habrá dado el desayuno ya.
_ ¿qué desayunaste, mami?
_ ¿qué desayuné?.... bueno, ¿y tú por qué eres tan preguntona?
Y ahí ya rompemos la carcajada las dos y nos reimos un rato porque ella se ha tomado muy bien lo de haber perdido la memoria de hechos recientes, porque gracias a Dios conserva la memoria remota.
De todas formas, aunque ella no me llegara a recordar, no importa porque todavía yo tengo en mis oidos el sonido de los latidos de su corazón de cuando me acunaba contra su pecho para dormirme.
Por eso en este día digo :

¡Gracias, Señor por mi madre!