En el Auditorio de Tenerife, durante esta semana del 19 al 23 de marzo de 2007 se está celebrando un Congreso con el lema: LITERATURA Y MUJER, con el que ha querido el Cabildo de Tenerife reconocer la aportación de la mujer a través de la Historia en la Literatura, bien directa o indirectamente.
Por tal motivo se están dando encuentros muy interesantes con escritoras de prestigio internacional, tal es el caso de la señora Nélida Piñón, escritora brasileña, Premio Príncipe de Asturias 2005 y que ha sido la encargada de la conferencia inaugural, que lleva por título, Literatura y Mujer: perspectivas del siglo XXI.
En su apasionante intervención hizo un repaso por la Historia del papel de la mujer aportando a la Literatura su influencia directa e indirecta, sobre todo transmitiendo la memoria colectiva de vivencias poéticas desde la óptica femenina.
Nélida Piñón desde el inicio de su intervención contactó magnificamente con el público asistente, creándose un ambiente de complicidad, de tal forma que, al término, se entabló un animado coloquio intercambiando opiniones y contestando a preguntas hechas por el público, que le aplaudió efusivamente al terminar la conferencia, dándose por inaugurado el Congreso de Literatura y Mujer.
El martes 20 protagonizaron los actos las dos grandes escritoras gallegas: Susana Fortes y Cristina Sánchez Andrade, que hicieron las delicias del público asistente con su sencillez y dulzura en sus respectivas exposiciones, en las que ambas dan una gran relevancia al papel de la mujer en la Literatura tanto como productoras de narraciones, cuentos o poesía, como incitadoras influyendo en sus descendientes varones.
El miércoles 21 de marzo tuvimos la enorme fortuna de contar en el Congreso Literatura y Mujer de Tenerife, con la participación de una de las voces más autorizadas dentro del ámbito literario, que ha sabido reivindicar de una forma elegante el lugar de la mujer en la Literatura: Rosa Regás.
Habló Rosa Regás de una manera tranquila, agradeciendo a los hombres asistentes a la conferencia por interesarse por estos temas, y durante hora y media disertó sobre la situación de la mujer, no sólo en la Literatura sino en la sociedad en general, reflexionando sin ningún atisbo de resentimiento ni revanchismo, que hemos vivido a lo largo de la Historia en una sociedad patriarcal en la que los roles de hombre y mujer han estado muy bien delimitados. Por lo tanto no debemos achacar toda la responsabilidad a los hombres, puesto que, no olvidemos que la mujer, tradicionalmente también ha sido la que educa al hombre.
Al finalizar la conferencia se inició un coloquio en el que se llegó a conclusiones muy interesantes, como por ejemplo, considerar que al privar a las mujeres de sus derechos, el hombre tampoco se podía decir que tuviera derechos ya que no estaban generalizados y no se podían considerar como tales, sino como privilegios. Además con el avance de la mujer en la conquista de los derechos plenos, también se ha beneficiado al hombre, ya que se le ha liberado de la carga que le suponía tener siempre que adoptar el rol dominante, con lo que se perdía poder mostrar sentimientos, prodigar ternura, poder equivocarse o comportarse libremente sin las atadura o cortapisas impuestas por su condición de hombre "puro y duro".
M.C.Martín Mendoza
